El cerebro adicto
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Eje 3 “Estrategía de aprendizaje”
UnADM Universidad abierta y a
distancia de México.
Introducción
Las
adicciones se definen como enfermedades crónicas y recurrentes del cerebro que
se caracterizan por la búsqueda y el consumo
compulsivo, ya sea de drogas, juegos de azar, de alimentos, etc.
Las investigaciones de la Dra. Nora D. Volkow
Directora del NIH National Institute on Drug Abuse, orgullosamente
egresada de la Universidad Nacional Autónoma de México, la llevaron a la
conclusión de considerar las adicciones como enfermedades, dejando en claro los
riesgos, las consecuencias sociales, el deterioro en la economía familiar, el cómo
los adictos se convierten en delincuentes al no tener los medios económicos
para adquirir la droga.
Se explica claramente el funcionamiento de
las drogas en el cerebro de quien las consume y el daño agregado por el
deterioro que ocasiona al organismo, así como las enfermedades que comúnmente
se presentan en los adictos, tales como cirrosis hepática, VIH, tuberculosis, alteración
de los sistemas cardiovascular y respiratorio y especialmente el daño irreversible
que ocasionan las drogas al sistema nervioso, llegando a presentarse
alucinaciones e incluso la esquizofrenia.
Existen datos estadísticos
referentes a la drogadicción en el Distrito Federal que nos indican 4,000 muertes por año, y según la ONU 200,000
por año en el mundo, noticia dada por el canal televisivo CNN en español, CNN1009 ET (1409 GMT) 27 junio,
2012,
Se hace mención especial a las medidas de
prevención que harán que los jóvenes en desarrollo no sean presa de las
adicciones.
El cerebro adicto
La drogadicción fue descubierta como enfermedad hasta los años
90´ (60 años después de que se reconocieran oficialmente las drogas como tales
1930) cuando la Dra. Nora D. Volkow descubrió la influencia de las drogas sobre
diversas zonas del cerebro, notando que tenían todas las características de una
enfermedad: Modifican la química, la estructura y el funcionamiento del órgano
dañado como todos los padecimientos reconocidos como enfermedades.
La estructura química de las drogas es muy
parecida a la de un neurotransmisor natural, por lo que el cerebro
lo acepta como tal, pero la droga produce una cantidad excesiva de
neurotransmisores y esto ocasiona un desorden en el funcionamiento natural del
cerebro.
Existen drogas como la heroína que desde la
primera vez que se consume, produce una modificación estructural del cerebro y
a partir de ese momento el individuo requerirá de consumir la droga ya que el
cerebro ya está “programado” para exigírsela como una necesidad primordial.
El daño que ocasionan las dogas en las
neuronas y en los circuitos cerebrales transforma la actitud del adicto, disminuyendo
su capacidad de concentración y de aprendizaje.
BALER
cita que "los factores genéticos representan un 40 o 60 por ciento
del riesgo total para adquirir una adicción, pero tendría que coincidir para su
desarrollo con el entorno social y familiar en el que el individuo se
desarrolla", por ello es importante que toda persona conviva
en ambientes alejados de las drogas de quienes las facilitan o venden y de
quienes las consumen, porque el que las consume comúnmente quiere que quienes
le rodean las consuman también.
Se
considera que el inicio en las drogas
antes de los 25 años aumenta el riesgo de depresión y de esquizofrenia.
Cuando
falta la droga, el organismo le empieza a exigir la droga al adicto
y este tiene que drogarse con más frecuencia y en mayores cantidades de droga
para conseguir el mismo efecto, dañando de esa forma más su organismo.
Los adictos llegan a matar y/o robar a
la familia, a los amigos, a toda persona o negocio que represente una fuente
económica para solventar el gasto que le ocasiona su adicción.
La adolescencia es la edad más propicia para
iniciarse en las adicciones y es por eso que se debe de tener una
relación más cercana con todos los hijos, pero mayormente con los jóvenes.
Es común que se descuide a los jóvenes en el
aspecto afectivo y esto se ve con más frecuencia cuando existen hijos menores a
quienes se les dedica más atención.
Adicción y enfermedad mental.
A continuación se presenta un mapa
conceptual con los factores que tienen una trascendencia importante en el costo
económico para la atención de los adictos e indirectamente a los demás miembros
de sus círculos familiar y social.
Conclusiones
Por lo anterior nos damos cuenta de que
los adictos por si solos no pueden dejar la droga por lo que es necesario un
apoyo dirigido por los profesionales de la salud especializados en adicciones.
Así
mismo después de las investigaciones realizadas para crear este texto, estamos conscientes
de que se requieren mayores recursos
para proyectar la información necesaria y hacerla llegar a los grupos
vulnerables ya que los mayores recursos se destinan a la atención médica y
pocos a los programas de prevención.
De
igual forma consideramos que las acciones que las instituciones realizan
no han dado los resultados que se
Reflexión:
Se ha avanzado en las investigaciones
científicas de una manera contundente, de tal forma que se ha cambiado el
enfoque de comportamiento social a enfermedad, habiendo transcurrido demasiado tiempo
en ello, por lo que hay que actuar de manera más rápida y eficiente con
sistemas de prevención más efectivos en todos los ámbitos que integran la sociedad,
empezando por lo familiar e incluyendo en forma especial a las instituciones educativas
